Qué es el feedback positivo y el negativo, ejemplos y errores a evitar en la comunicación de tu empresa

¿Qué es el feedback?

El feedback es un proceso interactivo en el que se comparte información, pensamientos y observaciones con el objetivo de mejorar las habilidades individuales y la eficiencia de los equipos y organizaciones.

¿Pero qué significa feedback exactamente? Podemos traducir feedback como retroalimentación, debe ser recíproco, lo que implica una comunicación bidireccional. Al fomentar una comunicación abierta y honesta, las empresas pueden crear un entorno de trabajo colaborativo y productivo que impulse la innovación y el éxito a largo plazo.

¿Qué tipos de feedback existen?

Existen muchos tipos de feedback distintos y cada uno se utilizará en función del momento, contexto o incluso objetivo del feedback. A continuación te dejamos un listado con los tipos más destacados:

  • Feedback positivo: consiste en dar reconocimiento y elogio de logros y habilidades sobresalientes, impulsando la motivación y autoestima de una persona o equipo.
  • Feedback constructivo: es el feedback que señala áreas de mejora y proporciona orientación para corregir comportamientos o habilidades en desarrollo.
  • Feedback 360 grados: este tipo de feedback recopila evaluaciones desde distintas perspectivas (colegas, supervisores y subordinados) para obtener una visión integral del desempeño.
  • Feedback escrito: proporciona retroalimentación por escrito en correos o informes, documentando el progreso de un empleado, por ejemplo, y sirviendo como referencia futura.
  • Feedback verbal: comunicación directa y personal en conversaciones cara a cara o reuniones, facilitando la comprensión clara de los mensajes. Este tipo de feedback también se puede llamar feedback 1 a 1 cuando se trata de forma individual.
  • Feedback de resultados: es el feedback que se enfoca en logros tangibles, estableciendo una conexión entre el esfuerzo y el impacto obtenido.
  • Feedback de desarrollo: planifica el crecimiento profesional, discutiendo oportunidades de aprendizaje y habilidades a desarrollar para fomentar la mejora continua.
  • Feedback formal: es una retroalimentación estructurada y planificada que se lleva a cabo en momentos específicos, como evaluaciones de desempeño o revisiones trimestrales. Este tipo de feedback se basa en criterios preestablecidos y suele estar documentado en formatos formales.
  • Feedback informal: es una retroalimentación espontánea y no estructurada que se brinda en situaciones cotidianas de trabajo o personales. Puede ser una conversación rápida o un elogio casual, lo que lo hace más accesible y cercano.
  • Feedback de autoevaluación: permite a los empleados evaluar su propio rendimiento y habilidades. Es una herramienta valiosa para la autorreflexión y para que los empleados asuman un papel activo en su desarrollo profesional.

¿Para qué sirve el feedback en una empresa?

El feedback sirve para poder comunicar abiertamente una opinión respecto a un hecho, comportamiento, producto, servicio o persona. Algunos de sus beneficios son:

Mejora el rendimiento y el desempeño.

El feedback continuo proporciona una evaluación constante del trabajo y permite la identificación de fortalezas y debilidades. Esto ayuda a los empleados a centrarse en áreas de mejora, lo cual lleva a un aumento en la eficiencia y eficacia en el trabajo.

Facilita la comunicación abierta y transparente.

La retroalimentación abierta y honesta construye una relación de confianza entre los empleados y la dirección. Elimina las barreras de comunicación y promueve un ambiente donde las ideas y opiniones pueden ser compartidas libremente.

Fomenta la colaboración entre empleados y equipos.

El feedback puede ser un catalizador para mejorar la colaboración en equipo, identificando áreas donde la cooperación puede mejorarse. Fomenta la sinergia entre los empleados y ayuda a alcanzar los objetivos comunes de la organización.

Proporciona comentarios positivos y constructivos.

Un feedback bien estructurado y positivo puede inspirar y motivar a los empleados. Los comentarios constructivos, incluso si son críticos, pueden ser una herramienta poderosa para el crecimiento y el desarrollo personal y profesional.

Ayuda a comprender expectativas y objetivos.

La retroalimentación clara y consistente asegura que los empleados comprendan lo que se espera de ellos y cómo sus metas se alinean con los objetivos generales de la empresa. Esto conduce a una mayor alineación y cohesión en toda la organización.

Motiva a los empleados y fortalece su compromiso.

La retroalimentación positiva y el reconocimiento de los logros aumentan la motivación y el compromiso de los empleados con la empresa. Esto no solo mejora el rendimiento, sino que también fortalece la lealtad y retención del personal.

Impulsa el desarrollo y el éxito organizacional.

El feedback juega un papel vital en el desarrollo de estrategias de crecimiento y éxito en una organización. Ofrece insights valiosos que pueden ser utilizados para tomar decisiones informadas y adaptarse a los cambios del mercado.

Identifica áreas de mejora y oportunidades de crecimiento.

La retroalimentación efectiva identifica áreas donde pueden realizarse mejoras. Esto permite a la organización centrarse en esos puntos críticos y trabajar en ellos para garantizar un crecimiento y desarrollo continuos.

Fortalece la cultura de aprendizaje y desarrollo profesional.

La retroalimentación regular promueve una cultura de aprendizaje continuo. Ofrece orientación y soporte para el desarrollo profesional, ayudando a los empleados a alcanzar su máximo potencial y contribuyendo al éxito de la organización.

Promueve un ambiente de trabajo positivo y productivo.

El feedback positivo y constructivo crea un ambiente de trabajo donde los empleados se sienten valorados y apoyados. Esto no solo mejora la satisfacción en el trabajo, sino que también lleva a una mayor productividad y eficiencia en la organización.

Feedback cliente a empresa

¿Qué es?

Si lo acotamos al contexto de la relación entre el cliente y la marca o la empresa, el feedback sería el proceso mediante el cual una persona que recibe un producto o servicio comunica, de algún modo, su nivel de satisfacción.

Partamos de esta idea: el feedback puede ser positivo cuando la empresa ha logrado colmar las expectativas del consumidor o incluso mejorarlas, pero también negativo, en el caso de que se expresen decepciones y quejas.

También es posible que el cliente comunique algún tipo de sugerencia para mejorar la calidad de lo que ha comprado o contratado. En ambos casos, ¡escucha y evalúa!

Por qué es importante para una empresa

Una buena comunicación entre cliente y empresa puede suponer importantes beneficios para esta última, como, por ejemplo:

  1. Es una gran oportunidad para detectar errores y áreas de mejora.
  2. Puede proporcionar importantes ventajas frente a la competencia.
  3. Ayuda a fidelizar clientes y conseguir nuevos.
  4. Permite corregir fallos de todo tipo: de logística, técnicos, de atención al cliente…
  5. Un análisis adecuado de la opinión de los clientes puede servir de base para poner en marcha procesos de mejora continua.

En definitiva, conocer mejor a nuestros clientes, gracias a sus comentarios y apreciaciones, es sumamente esencial para obtener mejores resultados a todos los niveles: efectividad, rentabilidad y productividad.

Además, el feedback directo puede llegar a utilizarse como información complementaria, y, a veces, como contrapunto, para matizar las conclusiones a las que hemos llegado tras la realización de una encuesta y/o un estudio de mercado más general.

Cómo aprovechar el feedback

Una vez recibidos los comentarios de los clientes, ya sea por medios online (comentarios en blogs, redes sociales, formularios, etc.), mediante una conversacion telefónica o cara a cara, llega el momento de aprovechar esta información a nuestro favor, haciendo así crecer nuestra tienda online o cualquier otro negocio.

¿Cómo lograr que el feedback nos beneficie como empresa? Para ello es importante seguir los siguientes consejos:

  • Actuar con rapidez en el caso de comentarios negativos. Hoy en día, es fácil que una mala opinión sobre una determinada marca o empresa se viralice en las redes sociales, y puede echar por tierra en poco tiempo una buena reputación construida con muchos años de trabajo impecable. Se trata de las temidas crisis online, que solo pueden solucionarse con decisión y rapidez de reacción, tomando las medidas necesarias y justas, sin tratar de tapar el problema o error.
  • Analizar los comentarios de los clientes en equipo y con actitud proactiva, pensando siempre en las acciones que se deben llevar a cabo para corregir errores y mejorar las áreas más flojas.
  • Elaborar planes de trabajo con acciones concretas y fechas (cronogramas) para implantar las medidas necesarias derivadas de las críticas y sugerencias recibidas.
  • Siempre se ha de ser honesto con nuestro cliente cuando realmente no hemos hecho un buen trabajo: esta actitud suele ser muy bien valorada por el cliente y muchas veces es el mejor método para evitar perderlo definitivamente.
  • Aprovecha la ocasión para motivar al equipo: el feedback con el cliente es una magnífica oportunidad para que el equipo de trabajo de una empresa sepa si está haciendo las cosas bien o, por el contrario, se deben mejorar. Con espíritu de superación y mentalidad positiva, hasta el comentario más duro puede servir para mejorar la actitud del equipo de trabajo y lograr un plus extra de motivación.
  • Haz de la tecnología tu gran aliada. Las últimas aplicaciones de análisis de voz y texto son capaces de estructurar y organizar automáticamente los comentarios, muchas veces caóticos, propios de la retroalimentación no solicitada previamente. Y esto supone una ayuda inestimable para un análisis rápido y eficaz.

En definitiva, gestionar adecuadamente la relación con el cliente es cada vez más importante para el éxito de cualquier empresa, y aún más las de cariz marcadamente online. La suma del análisis eficaz de los comentarios, la reacción honesta y rápida, y el aprovechamiento de este feedback para mejorar procesos es la mejor garantía de consecución de buenos resultados a partir de la opinión de los usuarios.

9 errores de feedback a evitar en la comunicación empresarial

Una vez vista la importancia de dar feedback, tanto positivo como negativo, me gustaría abordar algunos errores comunes en las empresas que cometemos a la hora de dar feedback.

Como bien sabrás, la forma en la que nos comunicamos con los demás es la clave para que esa comunicación se desarrolle por un camino fructífero. Las formas, el tono comunicativo, el momento ideal… son solo algunos de los puntos que hay que tener en cuenta para conseguir que ese feedback sea bien recibido y ayude a cumplir su cometido de mejora profesional dentro de la empresa.

Aquí te dejo 9 errores de feedback que debes intentar evitar en tu empresa. ¡Toma nota!

1. Confundir feedback negativo con crítica

El primer punto a tratar es el que más confusión puede generar y mayores problemas pueden provocar con la otra persona.

Puede resultar común confundir el feedback negativo con la crítica. Como te comentaba al inicio, estos dos términos se emplean para definir situaciones muy diferentes: con el primero lo que se pretende es conseguir que el receptor de la información tenga constancia de algún punto de mejora para que pueda trabajar en él, y, en el segundo, el objetivo es criticar de manera directa qué se está haciendo o cómo se está llevando a cabo una tarea. El primero siempre irá con fines positivos hacia la mejora, el segundo es posible que no se formule con esa intención.

Como ves, es importante que cuando te plantees dar feedback negativo cuides bien la forma en la que vas a hacerlo, para que este no se confunda con una crítica. Una buena forma sería empezar las fases con un “creo que…” o “es posible que puedas mejorar”, sin dar lugar a que la persona pueda sentirse juzgada.

En definitiva, el empleado debe sentir que te preocupas por él o ella, por su desempeño y su crecimiento profesional, y que ambos estáis alineados en la consecución de unos objetivos comunes.

2. Dosificar el feedback negativo

Es posible que pienses que es mejor decir las cosas menos agradables poco a poco. Pues bien, esta es una creencia totalmente falsa. Lo ideal es mantener una reunión en la que se comuniquen todos los puntos de mejora al trabajador, de tal forma que este vea que es una reunión productiva y que el dolor que sienta solo sea una única vez. Si los vamos dosificando en el tiempo, la imagen que se obtiene es de reproche o recriminación, y esto es totalmente lo que queremos evitar.

3. Juntar feedback positivo

Al contrario del feedback negativo que se tiene, que es más conveniente comunicar en una única reunión si es posible, el feedback positivo se puede dosificar a lo largo del tiempo. El motivo es muy sencillo: puede resultar una buena forma de mantener siempre alta la motivación del trabajador, ya que siempre es bueno recibir noticias agradables repartidas en el tiempo.

4. Empezar por el feedback negativo

Una de las técnicas más empleadas para dar el feedback es la conocida técnica del sandwich, que, más o menos, sería así: feedback positivo + feedback negativo + feedback positivo.

Como ves, los puntos fuertes son el principio y el final de la conversación con el fin de que el trabajador pueda tener una actitud abierta desde el principio y no se sienta atacado y, además, no se vaya de la reunión con un mal sabor de boca, es decir, que se vea acolchado.

5. No acotar el feedback negativo

Es importante, al dar el feedback negativo, que lo acotemos, es decir, comentar que esos puntos de mejora son solo en unos temas en concreto y no en todos, ya que eso ayudará más a focalizar la conversación y a que el trabajador conozca realmente qué tiene que mejorar y no se quede con la sensación de que los errores o áreas de mejora son en todo su trabajo.

6. Comunicar el feedback negativo por la mañana o a principios de semana

A veces es común empezar el día o la semana con reuniones de personal y comentar en ellas estos puntos de mejora. Si bien puede ser bueno a nivel organizativo, a nivel humano no es lo más idóneo.

En estos momentos hay que conseguir que el trabajador se sienta motivado, y decir en qué áreas puede trabajar no es la mejor manera de empezar el día. Lo mejor es que realice este tipo de comunicación a última hora de la jornada laboral para que, además de no afectar a la motivación, el trabajador pueda pensar en lo que se ha comentado y tenga un tiempo de reflexión.

7. Utilizar solamente feedback unidireccional

Que el feedback se perciba como unidireccional es un gran error. Lo mejor es dar la opción a todas las personas a dar su opinión y que esta sea tenida en cuenta. Solo haciendo esto se conseguirá el objetivo de mejora profesional y de productividad.

8. No seguir un proceso

Otro punto a tener en cuenta es no seguir un proceso, ya que, si no lo seguimos, es posible que la conversación no tome el camino adecuado. Lo mejor es seguir siempre el mismo proceso a la hora de dar feedback: identificar, analizar la causa o las causas, reflexionar sobre cómo comunicar, proceder a la comunicación, buscar soluciones tanto el empleado como el evaluador y, por último, realizar un seguimiento de cómo va evolucionando este feedback.

9. No dar ejemplos de situaciones

Ilustrar el feedback con ejemplos es una buena forma de que la persona sepa qué casos en concreto se pueden mejorar. Como bien sabes, la mejor forma de interiorizar un concepto o información es ilustrarlo con ejemplos.

Conclusiones sobre el feedback

Estos son algunos consejos que debes tener en cuenta a la hora de dar feedback. Es muy importante que el feedback positivo y el feedback negativo fluyan de manera bidireccional por la empresa a todos los niveles, ya que así es la única forma de seguir mejorando y creciendo como empresa y como profesionales, y conseguir la tan ansiada cultura de mejora continua en la empresa.



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